El cuadro de indicadores de la innovación 2020 de la Comisión Europea distingue a los países nórdicos.
En materia de innovación, los países de la Unión Europea no van todos a la misma velocidad. Según la última edición del cuadro europeo de indicadores de la innovación (EIS, European Innovation Scoreboard), presentada en junio de 2020 por la Comisión Europea, los distintos estados miembros muestran avances como mínimo dispares.
Este informe anual ofrece una evaluación comparativa del rendimiento en investigación e innovación de los países miembros de la UE y de algunos terceros países, y destaca los puntos fuertes y débiles relativos de sus sistemas de investigación y de innovación entre 2012 y 2019.
Dinamarca, Finlandia, Luxemburgo, Países Bajos y Suecia, a la cabeza de los líderes en innovación europea
Si bien los rendimientos del conjunto de la UE siguen creciendo a un ritmo regular, en particular, por los fuertes aumentos en ciertos indicadores (penetración de Internet de alta velocidad, participación en publicaciones científicas internacionales y gastos de innovación sin contar I+D), hay un grupo destacado de cinco países: Dinamarca, Finlandia, Luxemburgo, Países Bajos y Suecia.
Les siguen otros siete países (Austria, Bélgica, Estonia, Francia, Alemania, Irlanda y Portugal) con rendimientos superiores o cercanos a la media de la UE. Los 15 estados miembros restantes quedan más rezagados, con Bulgaria y Rumanía en las últimas posiciones.
Rendimiento científico y entorno favorable
Los cinco países clasificados por el EIS como líderes en innovación tienen, por término medio, un elevado nivel de rendimiento científico (que se mide, principalmente, por las publicaciones), un entorno favorable a la innovación (banda ancha y emprendimiento centrado en la innovación) y una intensa actividad en materia de propiedad intelectual (patentes…).
“Estos países se caracterizan también por su excelencia científica y tecnológica, y por ofrecer un entorno favorable a las empresas para que las transformen en innovaciones”, analiza un portavoz de la Comisión.
Este grupo de líderes, compuesto básicamente por países nórdicos, se beneficia también de los rendimientos de los mercados del norte de Europa en cuanto a recursos humanos (doctorados, formación continua…) y atractivo de su sistema de investigación. “Cabe destacar que hay otro país nórdico, Noruega (externo a la UE), que también destaca por su nivel de innovación y está cerca de convertirse en un Innovation Leader”, se indica a la Comisión.
China le pisa los talones a la UE
Globalmente, la UE mantiene su ventaja respecto a los Estados Unidos y China en lo que respecta a doctorados, gasto público en I+D y exportaciones de productos de media y alta tecnología.
Sin embargo, va por detrás de Corea del Sur y Japón debido a la menor proporción de población en edad de trabajar que ha tenido acceso a educación superior, un menor gasto en I+D de las empresas, menos solicitudes de patentes y registros de marcas y, por último, menos exportaciones de productos de media y alta tecnología.
“En términos relativos, la UE en su conjunto posee una mano de obra menos formada, y su sector empresarial tiene un rendimiento menor en cuanto al desarrollo de nuevas tecnologías, lo que repercute en su posición competitiva”, constata el portavoz de la Comisión.
Este último estima también que los activos intelectuales o los rendimientos de la Unión en su conjunto han disminuido respecto a 2012: “la UE parece haber sido penalizada por la falta de un mercado único de la propiedad intelectual”.
Según el informe de la Comisión, más a largo plazo y si las tendencias actuales se mantienen, en dos años el índice de innovación de China podría ser superior al de Estados Unidos, y que dentro de tres podría superar a la UE.