Un marketplace de equipos de segunda mano para reducir los residuos

Con el fin de reducir su volumen de residuos, las empresas de VINCI Energies pueden utilizar una aplicación móvil de compraventa de equipos que no usan.

Cada año, el sector de la construcción y las obras públicas en Francia genera 42 millones de toneladas de residuos. Entre los factores que pueden contribuir a una mayor sobriedad en el consumo de recursos, la economía circular sigue desempeñando un papel muy limitado, especialmente en cuanto a la reutilización de los equipos. Precisamente para responder al desafío de reducir los residuos en la construcción, VINCI Energies ha lanzado Reyuz, una plataforma móvil para la compraventa de equipos técnicos de segunda mano.

“En un momento u otro, una empresa se ve obligada a gestionar finalizaciones de contratos, traslados, errores de pedido o stocks inactivos. Hemos diseñado una aplicación móvil para que cada empresa de VINCI Energies pueda ofrecer a las demás gran variedad de equipos: mobiliario de oficina, materiales de consumo, mobiliario de obra (neveras, microondas, taquillas…), herramientas eléctricas o equipos técnicos”, detalla Stéphane Bretin, responsable de Mantenimiento y Servicios en Building Solutions.

Facilitar la apropiación del servicio

Sin stock centralizado, sin logística integrada: la idea es conectar las necesidades, poner en relación a vendedores y compradores para la compraventa de equipos descritos de forma bastante sucinta. Son las partes las que deben ponerse de acuerdo en la modalidad de compra y en el precio. Los diseñadores de la herramienta han optado expresamente por una oferta de servicio sencilla y clara. “Lanzar, y sobre todo mantener, una aplicación de economía circular es sin duda más difícil en el mundo de la empresa que en un entorno dirigido al público general. Los obstáculos a los que se enfrenta la adopción del servicio por parte de un mercado profesional son innumerables, lo que sin duda explica que existan tan pocas iniciativas de este tipo”, destaca Stéphane Bretin.

El primer reto es el efecto de masa. Una plataforma de este tipo requiere una comunidad de usuarios lo bastante grande para que la ecuación beneficios-riesgos se incline del lado correcto. Se trata de una condición clave, si tenemos en cuenta que el modelo, para cumplir con su objetivo medioambiental, debe operar en perímetros geográficos limitados a nivel local, como máximo regional.

«Adoptamos ante todo un planteamiento de responsabilidad social y medioambiental con el fin de limitar al máximo la generación de residuos. No se trata de ganar dinero, sino de caminar en la misma dirección que la historia”.

Otro de los obstáculos es que para los compradores, habituados a trabajar a partir de contratos marco bien definidos (proveedores, productos, precios, plazos de entrega), la reutilización de equipos parece más complicada que la compra de nuevos productos. También pueden surgir dudas sobre las garantías en cuanto a la logística (entrega, embalaje). La selección y coordinación de los socios a lo largo de toda la cadena de valor también requiere una promesa de transparencia.

Un producto de segunda mano no es necesariamente más barato

Para acabar, y aunque sea una paradoja, “de ocasión” no siempre significa más barato. Un producto reutilizado puede tener que pasar por distintas fases que impliquen mano de obra, como la remoción, la limpieza, el reacondicionamiento, el transporte o el almacenamiento. Además, al no existir una lista oficial de precios de segunda mano, puede alcanzar un coste equivalente al de un producto nuevo. “El objetivo de nuestra plaza de mercado consiste, en primer lugar, en adoptar un planteamiento de responsabilidad social y medioambiental con el fin de limitar al máximo la generación de residuos. Se trata de contribuir al desarrollo de la economía circular, de caminar en la misma dirección que la historia”.

Está previsto que esta solución, ideada, diseñada y desarrollada internamente, se despliegue en VINCI Energies a finales de febrero de 2022.

La solución ideada, diseñada y desarrollada internamente, se desplegó en VINCI Energies a finales de febrero de 2022.  A más largo plazo, podría servir para definir el impacto de carbono de las transacciones efectuadas para inyectarlo en la huella de carbono global del grupo.

14/04/2022