Con The Boson Project, la consultora defiende una convicción: la transformación de las empresas pasa en primer lugar por la autonomía y la responsabilización de sus empleados.
“Con la generalización del teletrabajo durante la crisis sanitaria, a veces hemos olvidado que la oficina es también un espacio de justicia social que permite que todos dispongan de las condiciones adecuadas para trabajar”. Fundadora en 2012 de The Boson Project, una consultora que ayuda a las empresas en su transformación, Emmanuelle Duez subraya los efectos del cierre de las oficinas en los empleados.
“Hay dos grandes riesgos relacionados con el periodo que estamos viviendo”, explica. “El primero es la desafección. El segundo, el aislamiento. La respuesta a estos riesgos se halla en la excelencia en materia de gestión, la capacidad de cuidar de los demás en la empresa”.
Y añade: “Por desgracia, no creo que la mayoría de las empresas fueran conscientes de hasta qué punto el papel de estos gerentes iba a ser crucial ante el desafío de volver a poner en movimiento el cuerpo social tras la crisis”.
Con su equipo de consultores, los “Bosones” —en referencia a las partículas elementales del mismo nombre que sirven de “pegamento” para unir la materia—, Emmanuelle Duez aspira a “crear las condiciones que permitan la plena expresión del potencial humano, individual y colectivo”.
“Las empresas deben reflexionar en profundidad sobre lo que justifica que las personas se desplacen desde sus casas para ir a trabajar a la oficina”.
Para preparar las transformaciones culturales y organizativas de la empresa del mañana, “hay que tener el valor de abrir la caja de Pandora involucrando a los principales implicados, los trabajadores, lo cual no es un factor de riesgo, sino todo lo contrario: un factor de sostenibilidad ante los cambios en curso”, afirma.
Investigación del impacto
Con 34 años, Emmanuelle Duez ya cuenta con la seguridad de una veterana del mundo empresarial, lo que a veces puede llegar a molestar. “En una conferencia en la que hablaba sobre la relación que hoy tenemos en el trabajo, un asistente, que cuestionaba que yo tuviera legitimidad para hablar sobre el tema con tanta seguridad, le preguntó al ponente que tenía al lado, un almirante director de recursos humanos de la Marina Nacional francesa, qué opinión le merecía. Mi vecino le paró los pies en seco. Desde ese episodio, el almirante y yo nos llevamos muy bien”.
Fue así como Emmanuelle Duez se incorporó en 2014 a la reserva ciudadana de la Armada francesa, “una gran oportunidad para construir puentes entre el mundo civil y el militar”. Desde hace casi dos años, también es uno de los miembros externos del Naval Innovation Hub, la revolucionaria estructura de innovación de Naval Group. “Esta colaboración con el mundo de la Marina le ha conferido una dimensión muy práctica a The Boson Project”, asegura hoy.
Emmanuelle Duez posee el don de convertir la adversidad en una ventaja. Espíritu emprendedor, descubrió su vocación un poco por casualidad: “De niña, quería ser criminóloga. Por eso estudié derecho penal. Me decanté por la especialidad de abogado-magistrado para finalmente descubrir que quería salvar el mundo. Así que pasé de la magistratura a una escuela de comercio ESSEC para, a través del emprendimiento, crear un proyecto que pudiera tener un impacto en la vida de las personas”.
Descubrió su faceta más emprendedora cuando creó la asociación WoMen’Up, en 2011, en el marco de la Cátedra de Liderazgo y Diversidad de ESSEC. “El acto emprendedor no es ni más ni menos que el medio para expresar mi personalidad”, reconoce.
Con el lema “en la empresa, ¡las mujeres y las jóvenes generaciones libran la misma lucha!”, el proyecto WoMen’Up, centrado en temas de gestión relacionados con las problemáticas de la igualdad de género en las grandes empresas, le ha abierto muchas puertas.
“Es un revulsivo para las prácticas de gestión en las empresas que permite ir a ver a los directivos y decirles: aunque la paridad por razones éticas no os convenza, de todos modos tendréis que hacer que vuestras organizaciones progresen por razones económicas y por la necesidad de atraer y retener el talento”.
El espacio, clave para la excelencia humana
Durante este periodo de crisis, la capacidad de percibir los cambios que se están produciendo, sobre todo en las nuevas generaciones, ha convertido a The Boson Project en un popular laboratorio de ideas. Desde 2016, The Boson Project trabaja en las problemáticas humanas relacionadas con los cambios espaciales en el marco del lugar de trabajo (reorganización, traslado). Emmanuelle Duez anima a las empresas a “reflexionar en profundidad sobre lo que justifica que las personas se desplacen desde sus casas para ir a trabajar a la oficina”.
En su opinión, reinventar el espacio de trabajo es una necesidad imperiosa. “En el contexto de los proyectos de promoción, es indispensable poder traducir sutilmente el factor humano y estratégico de las organizaciones en el espacio y acompañar al cuerpo social en la apropiación de estos proyectos inmobiliarios para que no sean causa de crispación, sino una oportunidad de compromiso. No debemos descuidar el componente humano en las transformaciones de los espacios”.
11/03/2021